miércoles, 18 de abril de 2012

DOS HORITAS NADA MÁS

DOS
 HORITAS

 NADA
 MÁS
 Hacía mucho tiempo que no sabía de Don Florindo, dice que tiene muchas ganas de jubilarse pero que todavía le quedan unos añitos que son los que más cuesta arriba se hacen.
 Me dio esta foto y unas letrillas, pues él en sus ratos libres también dice que es trovador y vuelaplumero. ¡Vamos! Casi primo hermano de Peromingo, pero este más campechano.
 “El señor calvo que sonríe en la foto (tercero por la derecha, hay que ver las cosas por su verdadero lado y el periódico al ser algo zurdo tira al suyo) pues bien ese señor no es el nuevo representante de Ikea pues su apellido al ser Wert, podría parecerlo. Es el nuevo ministro de Educación. Dicen que al darle la cartera sólo llevaba dentro unas tijeras bien grandes que con eso tenía bastante y que al estar bien “concertado” ya se sabía por dónde iba a recortar. Si veis el resto de las personas que tiene alrededor, todas están (pese a ser de su partido) con cara de circunstancias, de “si señor” y “ lo que usted. diga “.
 El señor ministro sonríe, disfruta, goza, está pletórico, porque sabe que a la Escuela Pública ( “dos horas más no afecta a la calidad”), le está metiendo mano, se la quiere cargar”. Debió de ser- me sigue diciendo Don Florindo- mal estudiante y hoy se está vengando con todas sus ganas…
DOS HORITAS NADA MÁS
 No te preocupes ni rajes
Que quien manda es la garganta
Dos horas más que trabajes
¡Ya verás lo bien que canta!

 Se le ha escapado un gallito
¿Uno? Lo menos van cuatro.
 La gracia es para Raulito
Que le encanta hacer teatro.
 Detrás del gallo va el cerdo
-Es la gracia del muchacho-
¿O es el asno? Ya me pierdo.
Tanta clase es un empacho.

 ¡Profesor!:” No está usted sano.
 Le mandamos al doctor
Sin baja le  denunciamos
Nos contagia, será  peor”.

 Se presenta Don Florindo
Otro día y con bufanda
Le asedian. Dijo:”me rindo”
¡A la cama! Que hay desbanda…

 Se acabó el romanticismo
¡Ya está bien de hacer el oso!
Hoy somos todos lo mismo.
¡La baja y su buen reposo!

 De las cuerdas fue al pulmón.
Al oído, a la barriga,…
Después: Recuperación.
El asunto tuvo miga.

 Dos horitas más de clase
No afecta a la calidad
Eso que se diga ¡pase!
Pero aquí, la realidad.

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