LAS NUBES
¿TIENEN VIDA?
A simple vista te parece que no. Pero te
puedes llevar una gran sorpresa. Porque
¿Qué decimos de los seres que tienen vida? Que nacen, crecen, se
reproducen, se trasladan y mueren.
Fíjate en esa página de revista, todas
las caras que ves, en tu mente reflejan
vida. Tienen nariz, boca, frente, ojos,… y te preguntas. Si tienen nariz,
respiran. Boca, seguro que les faltan algunas piezas dentarias, y comen.
Nos vamos a las nubes, nunca mejor dicho
y allí ves. Que tienen las mismas características, son igualmente seres vivos.
Analízalas, las hay guapas, feas, con nariz grande, pequeña; se trasladan y
cuando algunas de ellas se tocan, figúrate la que lían, lenguarazos, rayazos a mansalva, charlatazos, enfados,
chispazos y bramidos que suelen dar miedo.
Una vez que… mean lo que les da la gana
o destrozan todo lo que pillan a su alrededor, tras la tormenta viene la calma.
Y ves en el cielo nubecitas tranquilizadoras y muy bien planchaditas. Otras
enfadan a Don Viento y este las traslada a otro lugar y allí paren más y más
nubecitas o descargan todo lo que tienen y mueren para desgracia o beneficio de
los campos más cercanos. ¿Y las nubes
son capaces de “sentimentalizar” a la palabra?
La
pena que a estas se las coma el
verso y las borre la fugacidad de la palabra impresa.
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