TROVAS Y DONAIRES: EL ABANICO
Recuerdo cundo era chico / de aquella imagen, la abuela
Removiendo su abanico
¡Con tal arte! ¡Tenía escuela!
Pero abuela, le decía. / ¿No te cansa el movimiento?
Me miraba y sonreía.
Nuevo ademán, más aliento.
Quiero ponerte, abuelita, / un motor en tu abanico:
“Pues piensa en la maquinita
Que si aciertas, te harás rico”.
Unos años ya han pasado / y siento, que el tiempo vuela,
Con aire acondicionado
Que no viva ya la abuela.
Lo demás, cosas de chico. / ¡Qué más da de la patente!
Si es más sano el abanico
Silencioso y confidente.
(Entrada de La Alberca, con ermita de San Antonio al fondo. 1944/ 1945)
No hay comentarios:
Publicar un comentario