LA CLARIDAD DA ESPLENDOR
¡PARA QUE TE ENTERES!
Llama la atención la forma como dan hoy las noticias algunos medios de información. Ya puedes tener el oído bien atento, porque si no, no te enteras.
Pienso que hablan a tanta velocidad porque no les interesa que te informes, ya que a la media hora volverán otra vez a decir lo mismo y para no cansar o fastidiar prefieren que no les captes y quedes en suspenso para la próxima edición.
Los teléfonos dan tan seguidos que te quedas solamente con el prefijo. ¡Y el tiempo! Deben temer que pase enseguida pues apenas te hablan de la borrasca que entra por Galicia y ya están nombrando el viento de levante que salta por el estrecho.
No sucede lo mismo con los anuncios de propaganda que suelen decir pausados y si es preciso repiten cuantas veces sea preciso.
Esta costumbrita es preocupante si se traspasa al aula. Si el maestro está explicando entre dientes porque está deseando acabar para hacer la enorme burocracia con que le atosiga la inspección, el alumno no le sigue, se desespera o adormece. Los resultados por tanto van a ser negativos.
¿Qué ha dicho? Se escuchaba de vez en cuando por el aula. Y no le vayas a preguntar, porque encima se enfada.
Este mismo fenómeno sucede cuando se visita una exposición de pintura. Te ponen al lado de cada cuadro un cartelito con los datos del autor o de la obra. Para leerlos, a veces ni con lupa...
Lo mismo que la letra de ese despistado profesor que escribe en la pizarra con una letra tan pequeña que manda a media clase al oculista...
Son pequeños detalles que evitarían “el ya te lo dije”, “a este tío no hay quien le entienda” o “vámonos que esto es un rollo”,...
En la enseñanza esto es más preocupante y en vez de hacer sistemas para cortar o seleccionar debería ser más lógico que al profesor en su carrera o periodo de formación le enseñaran e insistieran que la palabra debe de ser clara, bien pronunciada y escrita con su tamaño adecuado.
La pizarra bien legible para que la vea correctamente el alumno que se tiene que sentar en un lado de la clase, como los que están en la última fila.
No por hablar muy de prisa / mejor se entera el oyente
Al revés “pierden la misa”
Bien sea de cura o docente.
Que lo hagan más pausado / comentando está un chaval
Bastante decepcionado:
Suelo pasarlo fatal.
Luego dicen no te enteras / ¡Oiga que va a todo tren!
¡Se ha fijado en el andén!
Y se embalan como fieras.
¡Multen! Si va a más de cien / Palabras en diez segundos
¿Cómo se va a enterar bien?
Lo que está es meditabundo.
Igual ocurre en las ondas / a las seis de la mañana
Las noticias son “rotondas”
Y te dejan con las ganas...
A las siete las siguientes / lo mismo que las primeras
Y aunque estáis ¡Que muy pendientes!
Ya lo ves que no te enteras.
-Eso sí, la propaganda / se entiende-¡como Dios manda!-.
En las noticias del tiempo / debe ser por tradición
Las dicen a todo viento
No siendo llegue un ciclón.
Por lo cual mi pensamiento / Sirva ya de conclusión
Habla DESPACIO y atento
Que importa la COMPRENSIÓN.